País
incorruptible es el cielo
constelado
de tus ojos
que
a veces lucen fríos y distantes
de
mis sueños y mis letras
El
tiempo pasa, es evidente,
y
de él bebieron con avidez nuestras venas
no
te resistas y acepta la vida como viene
ya
que las mismas nubes no regresan nunca
Y
un día la cal de nuestros huesos
quedarán
envueltas en la sábanas del viento
y
quizá tu canto y mis letras
descansarán
más allá de los dìas perdidos en el país de las cenizas.
Asoreth
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